TRANSCRIPCIÓN DE LA PARTICIPACIÓN DE LA DIPUTADA NOEMÍ BERENICE LUNA AYALA, PARA REFERIRSE AL TEMA DE AGENDA POLÍTICA REFERENTE A “CLAUDIA SHEINBAUM PARDO, PRIMERA PRESIDENTA DE MÉXICO”.

6 de Junio de 2024

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Ciudad de México, 06 de junio de 2024

 

 

TRANSCRIPCIÓN DE LA PARTICIPACIÓN DE LA DIPUTADA NOEMÍ BERENICE LUNA AYALA, PARA REFERIRSE AL TEMA DE AGENDA POLÍTICA REFERENTE A “CLAUDIA SHEINBAUM PARDO, PRIMERA PRESIDENTA DE MÉXICO”.

 

DIPUTADA NOEMI BERENICE LUNA AYALA (NBLA):-  Con su venia, presidente.

Legisladoras y legisladores.

Hoy, 6 de junio, se conmemora también el Día de la Paridad de Género y qué lamentable que iniciemos esta sesión teniendo que hablar de quien va a ser la primera presidenta de México, a quien no podemos felicitar porque su llegada será fruto de una elección de Estado.

El pasado 2 de junio se vivió la jornada electoral más grande de la historia de México en términos solamente cuantitativos, por el número de cargos que se eligieron. Pero en términos cualitativos ha sido vergonzosa, la elección más pequeña.

Se caracterizó por el uso clientelar de programas sociales, por la utilización facciosa de encuentros, por las encuestas con fines propagandísticos, por la intervención del crimen organizado y por la reiterada violación a la ley del Ejecutivo.

A pesar de que la Constitución impide la intromisión de las autoridades de los tres niveles de gobierno, el presidente Andrés Manuel López Obrador intervino de manera constante, indebida y descarada. Él aplicó lo que en la experiencia internacional se llama la elección de manual, en donde los autócratas llegan al poder por la vía electoral en democracia, pero una vez en el poder utilizan los instrumentos e instituciones para debilitar a la democracia que usaron de forma facciosa.

La perversidad nos coloca en una triste realidad. Desde la Presidencia de la República, se trabajó para deteriorar el sistema democrático e imponer a la sucesora.

Primero; utilizaron programas sociales con fines clientelares y electorales. El ejército de casi 20 mil siervos de la nación, burócratas pagados con 3.2 millones de pesos de recursos públicos, los seis años recorrieron casa por casa el país, para entregar apoyos con los que coaptaron a 24.6 millones de beneficiarios directos de distintos grupos poblacionales.

Casi 20 millones de esos beneficiarios tenían derecho a emitir su voto. Y representan el 20.6 de la lista nominal, pero representan el 32.6 por ciento de la proyección de sufragios para la elección presidencial.

Con esas cifras en las manos, los cuervos de la nación en cada entrega sembraron el desconcierto con la mentira de que al ganar la oposición dejarían de recibir las transferencias monetarias directas que el gobierno federal ha utilizado.

Segundo; la intervención del crimen organizado fue evidente. El presidente permitió la ingeniería, la coherencia de la delincuencia debido a su permisibilidad para dejar crecer, y ejemplos sobran, el saludo a la mamá de un delincuente, entre otros.

Atrás de la elección más sangrienta de la historia, se aprecia la mano de los cárteles por el asesinato de 42 aspirantes, precandidatos y candidatos.

Motivaron con extrema violencia a cientos de renuncias, como las declinaciones masivas en Chiapas con 515, y en Zacatecas, donde más de 500 mujeres aspirantes a cargos renunciaron. Y se impidió incluso la instalación de casillas en las zonas dominadas por el crimen organizado.

En tanto, el Tribunal del Poder Judicial de la Federación recibió decenas de quejas de la oposición por la intervención abierta del presidente de la República en las mañaneras, por lo cual en 30 ocasiones le llamaron la atención sin que el sujeto aludido dejara de promocionar a sus candidatos.

Viviremos una nueva configuración política en México y el PAN estará ahí para defender las instituciones, para defender la democracia, para defender las libertades, para defender el bien común.

Pondremos en alto el humanismo político y seremos la conciencia de este país, porque la patria es primero.

 

 

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